ABSTRACT

El asentamiento de las haciendas en la región de Tlaxcala estuvo ligado a los privilegios que la Corona Española les otorgó a destacados soldados como estímulo a su lealtad y por las proezas que pasaron al aliarse en la conquista de Tenochtitlán y algunos otros territorios; sin embargo, los indígenas tlaxcaltecas fungieron como peones en los primeros siglos de asentamiento de estos sitios. Las haciendas edificadas en Tlaxcala durante el virreinato fueron unidades productivas destinadas a la agricultura, la ganadería y de obtención mixta. (José Antonio Terán Bonilla 1996).