ABSTRACT

Si fuéramos a adoptar un planteamiento más tradicional, bien podríamos pedir garantías de que mediante el desarrollo de estructuras, políticas y estrategias formales, y proporcionando una gestión de dirección para los miembros de la organización, nuestro éxito sería más que probable; o, dicho de otra manera, conseguiríamos hacerlo bien. Pero para la mayoría de nosotros nuestra experiencia consiste en que, a pesar de los muchos libros que hayamos leído, de los numerosos cursos a los que hayamos asistido y de los muchos cambios que hayamos realizado, las organizaciones de las que nos hemos ocupado, aún no han tenido éxito y algunas incluso han fracasado por completo. Incluso cuando hemos seleccionado las que nos parecían que contaban con el mejor personal y les hemos proporcionado los términos y condiciones atractivos y algunas de las mejores condiciones de trabajo, muchos de nosotros todavía no llegamos a alcanzar el éxito que habíamos previsto en las organizaciones de las que se trataba.