ABSTRACT

La ironía y el humor se han incorporado en las últimas décadas como objeto de estudio en el ámbito de la pragmática. El interés por estos dos fenómenos tiene que ver, entre otros factores, con el hecho de que son prácticas conversacionales que incumplen o transgreden el principio de cooperación entre los hablantes. Del mismo modo, son hechos que pueden exigir un mayor esfuerzo cognitivo por parte del interlocutor o receptor de un texto a la hora de inferir el significado que se desprende del acto comunicativo (Muñoz-Basols y Muñoz-Calvo 2015, 163). Como veremos a continuación, estos conceptos poseen características distintas pese a que ambos están relacionados desde el punto de vista pragmático y de la comunicación.