ABSTRACT
El mundo entero está asistiendo en los últimos años a
un aumento de los precios de los alimentos que
culminó con una subida sensacional en 2008. Parece
más que probable que los precios se mantengan
relativamente altos en los próximos años. Las
repercusiones de los elevados precios de los alimentos
en el problema del hambre se dejarán sentir a largo
plazo, pero ya están haciendo peligrar la lucha contra
esta lacra y las posibilidades de alcanzar los Objetivos
de Desarrollo del Milenio (ODM).