ABSTRACT

La distinción entre el lenguaje escrito y el oral no es una cuestión menor ni reciente, Platón ya trataba el tema en Fedro preocupado por la degradación del conocimiento causado por la escritura. Ong (1982) lamenta que las mismas reticencias de Platón se repitan al principio de la introducción de los ordenadores en nuestras vidas, siempre en contra de la informática. Como explica Ong (1982, p. 79), Platón sostenía que

la escritura era inhumana porque pretende establecer fuera de la mente lo que en realidad solo puede estar en la mente. Es una cosa, un producto fabricado. […] la escritura destruye la memoria. Los que utilizan la escritura se volverán olvidadizos, dependiendo de un recurso externo para los que carecen de recursos internos. La escritura debilita la mente.

Hasta la época de Platón, la tradición oral se basaba en la repetición para resolver eficazmente el problema de retener y procesar el conocimiento. Por eso, como expone Ong (1982), la escritura era ajena y artificial para Platón, era una tecnología externa como lo fue para muchos el ordenador en sus orígenes. Para Ong, la escritura es un proceso consciente y artificial que cumple unas reglas, pero que la escritura sea artificial no es para condenarla, sino para alabarla. Al igual que otras creaciones artificiales, y, de hecho, más que cualquier otra, es absolutamente encomiable y esencial para la realización de potenciales humanos más plenos e interiores, y en eso difiere del discurso oral según este autor. Ong sigue exponiendo las diferencias entre ambas y señala que la escritura es una tecnología bastante reciente en la historia de la humanidad y que aun así ha contribuido indiscutiblemente a su desarrollo intelectual. Sin embargo, no hay que menospreciar la oralidad, ya que, a pesar de la importancia que la escritura tiene para el desarrollo humano, esta depende, en última instancia, del lenguaje oral. Esto sirve de base para su definición: la escritura es un sistema de modelado secundario, dependiente de un sistema primario previo, el lenguaje hablado. La expresión oral puede existir y ha existido siempre sin ningún tipo de escritura, la escritura, nunca sin la oralidad.